domingo, 5 de noviembre de 2006

Kukushka

Dicen que la felicidad son momentos.... pero cuando éstos se alargan casi eternamente, ¿qué es? ¿Dicha? ¿Alegría? ¿Felicidad en sí misma? Bien, voy a definirlo como un estado de inmensa paz interna, de armonía contigo misma y el universo entero....

Siento como si estuviera viviendo en las nubes, tan alto que nadie puede hacerme daño, tan lejos que nadie puede tocarme, excepto él....

¿Qué si siento miedo? ¡Claro que tengo miedo! Miedo a lo desconocido, miedo a la realidad, miedo a despertar de este hermoso sueño y sentir frío al no tenerlo a mi lado, miedo a abrir los ojos y no ver nada, miedo al fracaso de mis metas y proyectos, miedo a volver a amar, miedo a sentirme amada, miedo a vivir algo así.... miedo a mí misma, a cambiar demasiado, a perder la noción de realidad y perderme en sus manos, en sus besos, en su amor....

Nuevas aventuras y experiencias se avecinan, relaciones trascendentales, que generen un cambio en la existencia, en el modo de pensar y de sentir. Sacrificios que te dibujan mil sonrisas en el rostro, trasnoches que te quitan el sueño y amaneceres que te llenan de energía, manos suaves que recorren las mias memorizando los mínimos detalles, besos que saben a poco y a rosas, la esperanza de algo nuevo que crece cada día mas.

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